Son doctoras, científicas y catedráticas puertorriqueñas marcando una huella en áreas relacionadas a la salud mental de los Estados Unidos. Pero, además, son mujeres creando historias propias como modelos profesionales a seguir por las niñas de todo el mundo. 

“Aspiren a algo más grande de lo que puedan imaginar. Los más exitosos no son los más inteligentes, son los más persistentes”, son las palabras que dedica a las niñas, precisamente, la primera mujer en resaltar en esta historia, Jenny Zhen-Duan, catedrática instructora en el Massachusetts General Hospital y Harvard Medical School, psicóloga clínica e investigadora con una mezcla cultural boricua, colombiana y china. Orgullosa, asimismo, de representar a Puerto Rico en los diferentes escenarios en los que brilla por su conocimiento. 

Para Zhen-Duan, criada desde sus tres años en Bayamón, Puerto Rico, y la primera de su familiar en ir a la universidad, su multiculturalismo fue motivo para sumergirse en la psicología social multicultural e investigar a fondo sobre el tema. 

«No hay salud sin la salud mental. La razón por la cual decidí enfocarme en la psicología multicultural es porque las personas de diferentes culturas perciben y viven los problemas de salud diferentemente. La cultura influye en cómo percibimos los problemas de salud mental y qué hacemos para lidiar con ello. Sin embargo, los tratamientos estaban y siguen siendo desarrollados para personas norteamericanas, blancas y de clase media. Estos tratamientos no se enfocan en las necesidades particulares de personas de diferentes culturas, géneros, orientación sexual, entre otras», explicó. 

Aseguró también que vivir entre culturas le ha permitido “aportar mi granito de arena para desarrollar tratamientos más exclusivos”, agregó. 

Aunque celebra sus logros, gracias a su empeño y dedicación, reconoció que académicamente, como mujer en un grupo étnico minoritario, ha experimentado la discriminación por temas de género y microagresiones machistas, como considerar sus contribuciones «menos en serio porque soy mujer»,

“El campo de la psicología clínica está dominado actualmente por mujeres, así que en ese aspecto me he sentido en mayoría, pero cuando uno va mirando las estadísticas de cuántas mujeres terminan siendo catedráticas permanentes, ese número disminuye drásticamente’’, dijo.

La fanática del sóftbol, los viajes y coleccionar plantas raras, vive agradecida de haber estudiado en la Universidad de Puerto Rico y vive orgullosa de demostrar a sus padres que “la migración para que sus hijos tengan un futuro mejor, valió la pena”, puntualizó. 

Y si hay otra mujer puertorriqueña en el campo de la salud de Estados Unidos que hoy está reescribiendo la historia de la enfermedad de Alzheimer, a través de sus investigaciones sobre el tema y la demencia, es la neuropsicóloga y científica posdoctoral de Harvard Medical School, Edmarie Guzmán-Vélez

Guzmán-Vélez, quien actualmente investiga cómo un estilo de vida activo, especialmente la aptitud cardiorrespiratoria, puede actuar de forma preventiva en el alzhéimer, es además codirectora del programa preuniversitario de neurociencia de la Universidad del Sagrado Corazón y Massachusetts Institute of Technology, una oportunidad de mentoría y talleres, con la ciencia como protagonista, para estudiantes de escuela superior.

“Para mí es de suma importancia que más allá de poder vivir más años, podamos vivir de manera saludable. El campo de la salud me parece vital para lograr que la sociedad se desarrolle y envejezca de manera saludable, tanto física como mentalmente. Por eso le dedico tanto esfuerzo y pasión a mi trabajo, el cual intenta identificar factores modificables que puedan disminuir el riesgo de desarrollar demencia y enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer. Yo espero que a través de él pueda contribuir al desarrollo de intervenciones que puedan, quizás, hasta prevenir la demencia algún día”, manifestó la doctora.

Siendo mujer y latina en el campo, al igual que Zhen-Duan, ha enfrentado muchos retos en el camino profesional. “La academia, en particular, es un sistema dominado por hombres mayormente blancos. Hay muy poca representación de negros, latinos y otros grupos considerados minorías en Estados Unidos. He tenido la dicha de tener mentores excelentes, tanto mujeres como hombres y otras personas alrededor, que me han ayudado a navegar el sistema, manejar situaciones retantes y a recordarme que soy capaz de lograr lo que me proponga”, explicó. 

No obstante, la fan del Crossfit, la cocina y la ficción, se siente privilegiada de poder representar a Puerto Rico cada vez que tiene la oportunidad de compartir su trabajo en nuevos escenarios. 

“Me da mucha alegría y orgullo decir que me crié y eduqué en Puerto Rico cuando presento mi trabajo en conferencias o seminarios, participo de una entrevista o cuando hablo con estudiantes u otros investigadores. A la vez tengo en mente que mi labor y desempeño le podría abrir o cerrar puertas a otros boricuas. Para bien o para mal, en ocasiones, si un boricua hace una buena labor se crea una reputación en el lugar y las puertas se mantienen abiertas. Pasa lo contrario si no se hace un buen trabajo y para mí es importante que, otros que vienen conmigo o después de mí, tengan las mismas o mejores oportunidades”, sostuvo.

Finalmente, Guzmán-Vélez compartió unas palabras para las niñas y jóvenes que quisieran seguir su camino. “Que se atrevan a hacer las cosas que quieren y sueñan, aún si sienten miedo. Ya sea miedo a fallar, a que no sea suficiente o posible. Se van a dar cuenta que son mucho más capaces de lo que piensan. Y por último, que no tengan miedo a pedir ayuda, incluyendo a personas que ustedes piensan que jamás le responderán. Hay mucha gente dispuesta a dar la mano y con mucho deseo de ver a otros triunfar”, concluyó. 

Otras profesionales que en la actualidad llevan el nombre de Puerto Rico por todo lo alto son la psiquiatra y profesora afroboricua, Lisa R Fortuna, así como la neurocientífica, criada en Puerto Rico, Jennifer Patritti Cram.

Las mujeres hispanas siguen brillando en el campo de la salud mental. Un informe de la Asociación Americana de Psicología, titulado Demographics of the U.S. Psychology Workforce, destaca que, en el 2019, sus perfiles demográficos eran ocupados, en un 77 por ciento, por mujeres. Entre las primeras tres posiciones se encontraban, además, las hispanas.