El neurofeedback es un tratamiento no invasivo que enseña el autocontrol de las funciones cerebrales a los sujetos mediante la medición de las ondas cerebrales proporcionando una señal de retroalimentación.

La modalidad alterna, aprobada por el Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) y fundada en base científica, se acoge en países  de Europa, América Latina y otros lugares, pero no se conoce en Estados Unidos por todos los profesionales, lamentaron Carmen García Oller y Fabiola Santos Vilella, psicólogas de San Juan Neurofeedback

Ambas enfatizaron el factor multidisciplinario de su uso, haciendo hincapié en que es una práctica que no se limita a ser usada solamente por expertos en la salud mental. 

La práctica a través de la que las personas aprenden a identificar y modificar las señales de su cuerpo con el propósito de manejarlas y mejorar su salud, conocida como biofeedback, fue la que dio paso al neurofeedback, explicó García Oller. 

Si yo estoy ansiosa, el cuerpo me da unas alertas: el corazón acelera, las manos se ponen frías y sudorosas, la respiración se altera…”, ejemplificó al destacar que el biofeedback trabaja en manejar estas señales y aprender a lidiar con ellas para poderlas regular. 

Estas modalidades alternas nacen de los estudios realizados sobre las ondas cerebrales que, según la experta en salud mental, se están haciendo desde los años 1800. A través de estas indagaciones apuntó que se han identificado que las distintas ondas están relacionadas con distintas sintomatologías, lo que queda evidenciado a través de la práctica del neurofeedback. 

El neurofeedback se usa hace más de 20 años y la diferencia entre ambas prácticas radica en que esta va directamente al cerebro, añadió Santos Vilella al aclarar que el biofeedback se basa en el cuerpo y el neurofeedback en el cerebro estudiando a través de unos sensores. 

Ambas psicólogas certificadas por la Alianza Internacional de la Certificación de Biofeedback (BCIA por sus siglas en inglés) en neurofeedback coincidieron en que esta práctica no es totalmente precisa, razón por la que es importante la entrevista al paciente.

¿En qué consiste la terapia de neurofeedback?

No tratamos con diagnósticos, sino con síntomas”, enfatizaron ambas expertas al hablar sobre cómo trabajan con los pacientes que asisten a terapias de neurofeedback

Por su parte, Santos Vilella compartió que disponen de instrumentos que emiten las respuestas biológicas del cuerpo como cuando la temperatura o la presión cambia y usan esa tecnología para que las personas entiendan la conexión entre estos estímulos y el cerebro, para así poder controlarlos. 

Asimismo, subrayó que en su práctica y la de su colega usan las dos prácticas: tanto neurofeedback como biofeedback

Explicó que lo primero que hacen es un electroencefalograma, colocando sensores en seis áreas distintas de la cabeza y poder identificar los distintos patrones, que se asocian con síntomas y problemas que el paciente tiene

En la primera sesión analizan los resultados, le hacen una entrevista clínica completa biopsicosocial, llenan unos formularios y proceden a sentarse con el paciente a discutir su impresión y comentar sobre sus recomendaciones, detalló. 

Cuando el paciente identifica que lo percibido a través de la terapia es lo que él o ella vive día a día, se empieza a hablar sobre cómo se va tratar de manera no invasiva, comentó.

Asimismo, hacen estadísticas de cada sesión para saber si la persona está respondiendo o no al tratamiento y tener constancia del progreso. 

Aquí se inicia un proceso para entrenar al cerebro para que esos patrones desregulados se regulen utilizando estímulos agradables, como sonidos de la naturaleza, música e imágenes.

El paciente puede pensar que no está haciendo nada, pero el cerebro está entrenandose”, resaltó al especificar que cada vez que el paciente llega al estado óptimo el cerebro recibe un estímulo que sirve de recompensa para que lo identifique como correcto y lo repita. 

Explicaron que después de las primeras 5 sesiones el paciente puede apreciar el progreso en el tratamiento, pero aclararon que no se puede establecer un periodo de tiempo de duración del mismo, pues depende de cada paciente. 

La persona necesita estar estable para participar del tratamiento y, en caso de que la persona esté atravesando una crisis psicótica o un desbalance agudo, no puede hacer el tratamiento, según explicaron.

Ambas concordaron en que lo más importante es crear un equipo de personas multidisciplinarias que contribuyan al progreso del paciente como psiquiatras y médicos. 

Beneficios de la práctica

“Muchas veces son pacientes que llevan muchos años en terapia o medicamentos, ya llegaron a un plateau o al máximo de lo que podían mejorar con esa modalidad”, explicó García Oller al describir cómo llegan muchos pacientes a su oficina. 

Destacó que el neurofeedback provee la alternativa de obtener otras mejoras y puede ayudar a disminuir el uso de un medicamento.

Ansiedad, problemas de sueño o memoria, depresiones, trastornos de déficit de atención e hiperactividad, concentración, fueron algunos de los síntomas o distorsiones tipificados por las expertas como aquellos en los que más usan el neurofeedback.

Mientras, otros estudios realizados por el Departamento de Psicología del Instituto Universitario de Investigaciones de la Salud de la Universidad de las Islas Beleares en España, también apuntan a los beneficios del neurofeedback para la epilepsia y trastornos de déficit de atención e hiperactividad.

En este caso, el estudio problematiza que, aunque el neurofeedback ha sido probado como un tratamiento efectivo para personas con trastorno de déficit de atención e hiperactividad, no es considerado el método estándar ni usado a gran escala para ello. 

Sin embargo, Santos Vilella aclaró que hay otras personas que vienen a su oficina sin tener sintomatología. Explicó que, en este caso, las personas puede que practiquen deportes o música, tengan un examen importante, quieran mejorar su desempeño o productividad en el ámbito laboral, entre otras circunstancias. Estas personas llegan a sus puertas de manera preventiva, lo que también apuntó como esencial. 

De estar interesado o interesada en más información sobre el neurofeedback, puede comunicarse al 1(787) 349-4335 o buscar a sanjuanneurofeedback a través de Instagram.