En una sociedad en la que se vive a un ritmo acelerado y se utilizan las redes sociales para mostrar realidades alternas del diario vivir, nace el concepto “productividad tóxica o porno de la productividad”, con ideas poco reales acerca de todo lo que una persona puede lograr en su día.
La productividad tóxica pone sobre la mesa que existe una línea muy fina entre ser productivos y obsesionarse con sobrepasar límites de autoexigencia. Esta conducta puede hacer acto de presencia en temas laborales, pero también al intentar copiar los estilos de vida de personalidades y figuras en las plataformas digitales.
“Es una productividad que se convierte en tóxica, porque es irreal y afecta a las personas que ven esto y tratan de emularlo”, dijo el psicólogo Carlo Blanco.
Trata, además, de una tendencia que propone la perfección como sinónimo de felicidad, “perdiendo la perspectiva del mundo real”, comentó por su parte la psicoterapeuta Jaennaries Torres Estrada.
La productividad tóxica, coinciden ambos profesionales de la salud mental, puede convertirse en un riesgo para la salud mental.
“Crean unas expectativas falsas y la persona que ve el contenido (en las redes sociales) cree que no es capaz de lograr las mismas metas y eso lo puede llevar a experimentar ansiedad, depresión, baja autoestima y sentirse menos”, explicó el doctor Blanco.
Y, de igual forma, Torres Estrada expuso que empuja a la persona a esperar aprobación de la sociedad de cómo debe vivir su vida.
“Tienden a pasar horas (haciendo) scrolling en las redes sociales, provocando pérdida de tiempo y procrastinando todo. Ejerciendo, además, una presión tóxica sobre ellos mismos”, afirmó.
A modo de ejemplo este tipo de productividad puede verse reflejada en el hecho de que, en un mismo día, se tenga que madrugar, meditar, desayunar, tener la casa limpia, crear agendas organizadas, comenzar sano y seguir una rutina, sin balances o siquiera fallar en el intento. Entonces, cuando pasa a sentirse como una obligación agobiante, se transforma en poco sano.
“Debido a que la productividad tóxica o el porno de la productividad nos está llevando a sentir angustia por no hacer todo en el tiempo o como corresponde, el sentido de culpa ha ido aumentando cada día más”, señaló la psicoterapeuta.
Agregó que “vender ideas que te invitan a cómo llevar una vida perfecta, afecta directamente la salud mental y emocional de todas y todos”.
Por otro lado, el doctor Blanco recomendó que las personas comiencen a tener más consciencia de sus redes sociales y lo que consumen en los medios de comunicación, pues no es un secreto que se presentan realidades alternas con el propósito de entretener a las personas.
“Lo que estamos viendo no necesariamente es un aviso o instrucción de cómo debemos llevar la vida y menos implica lo que realmente debe hacerse todo el tiempo. Si tenemos eso claro, podemos consumir el contenido sin problema alguno’’, puntualizó.
Mientras que Torres Estrada enumeró varios consejos, entre estos:
- Realizar prácticas deseadas durante el tiempo libre.
- Reconocer las limitaciones, pues “si no se puede de esa manera u hora, no pasa nada, sigo siendo productivo y lo lograré de otro modo”.
- Evitar emociones negativas de culpa, entendiendo que no todas las personas tienen el mismo tiempo, las necesidades y habilidades.
- Proponerse un tiempo para usar las redes sociales y saber desconectar.
- Eliminar autoexigencias tóxicas.
- Buscar ayuda profesional y priorizar la salud mental.