No son pocos los que al comenzar el año nuevo reflexionan sobre sus hábitos, sus acciones y sus relaciones durante los 12 meses anteriores.

Sin embargo, evaluar ciertas relaciones con amigos, familiares o amores, para algunos, es un tanto complicado. No es sencillo discernir entre las personas que causan un bien y las personas que causan un mal. 

La psicóloga y presidenta de Psy-Q Group, Jennifer Castro Cruz, explicó que determinar cuán beneficiosa ha sido una relación es complicado porque es un ejercicio en el que las emociones nublan el raciocinio.  

Las relaciones interpersonales son para ayudarnos, para crecimiento, para brindarnos seguridad, para que sean un apoyo en nuestras vidas y si una persona no está cumpliendo con eso, definitivamente, la invitación es a dialogar y si fuera necesario a cortar”, expresó Castro Cruz.

Las relaciones amorosas no son lo único que debe evaluarse al comenzar un nuevo año, ejemplificó. Es importante también evaluar las relaciones con familiares o con amigos.

La psicóloga coincidió con el consejero profesional, Víctor M. Serrano Román, en la importancia de reflexionar sobre el rol que la persona tiene en la relación.

Para Serrano Román, a las personas se les olvida descifrar cómo entraron en sus vidas esas personas que les ocasionaron daño. Este ejercicio es tan importante como terminar una relación. 

Precisamente, al concluir una relación, es importante que se evalúe cuál es la verdadera razón tras la decisión, resaltó el consejero profesional a Es Mental. ¿Es para huirle a un problema? ¿Es porque se perdió el interés? ¿O es porque se ha sufrido?

Para que una relación sea saludable, las partes involucradas tienen que obtener un beneficio mutuo, indicó.

“Es importante que se nos permita reconocer y validar cuando una decisión, aunque nos pueda afectar (emocionalmente), tras ponderar todas las variables, es una que realmente deseamos”, esbozó. “Que es una decisión que me interesa y que, con hacerlo, no afecta a otras personas más allá de mis propios intereses”.

La consejera profesional, María De Ureña Medina, exhortó a que previo a concluir una relación se busquen soluciones en conjunto tales como comenzar de nuevo o buscar ayuda profesional. Esta búsqueda tiene que ser de mutuo acuerdo con la otra persona.

“La comunicación afectiva es importante”, destacó la consejera profesional. “La telepatía no es una herramienta, así que hay que hablar y hay que estar dispuestos a escuchar también, porque muchas veces hablamos mucho, pero escuchamos poco”.

La persona ideal es una con la que se puede hablar cuando se tiene dolor, mencionó. Es importante que la persona no cause más ansiedad o estrés del que se vive día a día.

El consejero profesional y presidente de la Junta Examinadora de Consejeros Profesionales de Puerto Rico, Alberto Salas Román, indicó que la mirada de las personas puede ser clave para determinar cuán tóxica puede ser. Los gestos y las palabras que se utilizan al hablar pueden ser otro indicador que se puede utilizar para determinar si lo que dice la persona, lo cumple con acciones.

“¿Qué hay detrás de esas palabras de elogio? “¿Qué hay detrás de esas críticas que no son constructivas?”, mencionó como cuestionamientos que debemos hacer.

Cuando se escuchen críticas o comentarios despectivos de otra persona, Salas Roman instó que se pregunte directamente a la persona cuál fue la intención para eliminar toda posibilidad de duda.

De igual manera, mirar con atención el modo en el que la persona se comporte mientras esté en la relación.

Técnica para mejorar las relaciones

El consejero profesional mencionó que con la técnica del espejo se puede determinar cuán bien se siente una persona, lo que es importante previo a evaluar sus relaciones personales.

La técnica consiste en dibujar una tabla del uno al cinco. La persona tiene que utilizar la tabla todos los días para evaluar cuán bien se siente consigo misma cuando se mira al espejo. Esta evaluación tiene que llevarse a cabo varias veces al día. El cinco significa que la persona se siente súper bien mientras que el uno que se siente horrible. El ejercicio se tiene que llevar a cabo ininterrumpidamente durante dos semanas. Si al final de las dos semanas se obtienen más evaluaciones del uno al tres que del cuatro cinco, se tiene que buscar ayuda psicológica.

Los cuatro consejeros profesionales, así como psicólogos entrevistados, coincidieron en que las personas no deben evaluar sus relaciones personales todos los años, sino meses y semanas.